domingo, 24 de julio de 2011

She.

  Llegó a casa, y lo primero que hizo después de quitarse los zapatos fue coger el móvil y llamarle. Directamente, buzón de voz: El número al que llama está apagado o fuera de cobertura, si lo desea, puede dejar un mensaje tras oír la señal, gracias. Piiii.
"Estará sin batería en un antro de mala muerte", pensó. Y estuvo toda la noche llamándole, intentando contactar con él, pero nada. Tenía el móvil apagado y por más que llamase no iba a conseguir mas que dejarle llamadas perdidas que vería al día siguiente.
"No entiendo por qué ha apagado el móvil, ¿qué pasa? ¿Que no quería hablar conmigo? ¡Pues que me lo hubiese dicho! Pero que no me diga que tiene ganas de hablar cuando apaga el móvil para que no pueda llamarle, vamos... Es que me parece..."
Siguió hablando consigo misma, pero no consiguió nada. Simplemente no durmió por llenarle el móvil a llamadas, hasta que, afortunadamente el buzón de voz desapareció, y lo sustituyeron unos pitidos; se lo cogió.
-¿Qué haces despierta a las nueve? ¿Madrugando? Porque pensé que ayer salías de fiesta...
-Sí, tú lo has dicho. Salí de fiesta. Y tú me diste plantón.
-No te di plantón, simplemente te dije: "quizás no vaya", y eso hice. Avisé de que lo más probable era eso, que no me vieses esa noche.
-¿Y por qué apagaste el móvil? ¿Por qué no pude llamarte en toda la noche?
-Te estás volviendo un tanto histérica. Quería dormir, ahora que tengo que estudiar bastante -dijo, remarcando esta última palabra.
-Ya, pero bueno, sabiendo que yo te iba a llamar, podrías haberlo dejado encendido.
-Sí, y que me despertases a las cinco de la mañana, ¿no?
-Pues sí, tú mismo me lo dijiste cuando empezamos a intimar; que podía llamarte tanto y cuanto quisiera, a las horas que hicieran falta, que ibas a estar ahí siempre para distraerme, para hablar y para... para todo, ¿no?
  Se quedó callado. No tenía nada que decir, se le notaba perfectamente. Así que simplemente se despidió y colgó el teléfono, dejándola al otro lado sintiendo que había ganado una batalla que querría haber perdido.

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